¿A dónde va el dinero de los peajes en Miami-Dade?

Mientras el Condado Miami-Dade y el Congreso del estado de la Florida se debaten sobre el futuro de la junta de directores que determina el monto de los peajes, su costo es una preocupación para muchos residentes del sur de la Florida.

La población miamense seguirá creciendo al igual que la ampliación de calles y carreteras y el incremento de los peajes.

Una persona que vive en Kendall y se transporta todos los días al centro de la ciudad gasta cada mes al menos $52.80, y al año $633.20, si usa la SR 874 y la SR 836. Tan solo del Turnpike a la I-95 suma $541.80 al año, según la calculadora del costo de
peajes del Miami Herald.

Además, en horas pico, las rutas parecen interminables.

“Se pierden muchas horas en el tráfico. Yo tengo un vecino abogado que vive en Kendall y la oficina está en Downtown. Ese pobre hombre sale de la casa a las cinco de la mañana y no llega hasta las ocho de la noche,” dijo a SFMN Carlos García, activista local de Roll Back Tolls, una organización sin fines de lucro que aboga por los derechos de los conductores del sur de la Florida.

Según reportes de Miami-Dade Expressway Authority (MDX), durante los últimos 10 años fiscales esa organización ha tenido ingresos por 1.6 mil millones de dólares.

En la actualidad, las carreteras controladas por MDX (SR 836, SR 112, SR 874, SR 878 y SR 924) generan un ingreso de 252 millones de dólares, un incremento del 123% con relación al del 2009.

La MDX administra los peajes y garantiza que los ingresos se inviertan en el Condado Miami-Dade. La oficina financia sus operaciones con los peajes de sus cinco autopistas, mismas que mantiene y moderniza. Sin embargo, el crecimiento del flujo de
dinero ha preocupado a muchos.

“¿Cómo una agencia que era tan pequeña puede tener cerca de 300 millones de dólares (un aumento astronómico) en tan poco tiempo? Ahora capturan el 100% del dinero de quienes usan sus carreteras, por tanto, deben rebajar el costo el peaje,” dijo
García.

Tere García, miembro de la Junta directiva de MDX, explicó al SFMN que el aumento no se debe a un incremento en el costo del peaje. Según ella, en el 2007 sólo un 45 % de las personas que usaban las autopistas pagaban un peaje.

“Si en la 836 tú te montabas en la 87 avenida y te bajabas en la 27 no pagabas nada. Como se necesitaban más fondos, en lugar de incrementar el peaje existente se cerró el sistema,
incrementando nuevos peajes”, dijo Tere García.

Tradicionalmente, el sistema de autopistas había sido financiado por el impuesto a la gasolina, pero este no ha variado desde hace algunos años; por ello el fondo de transporte nacional ha decrecido.

Esta es la razón de ser de los peajes. Surgen como
un método para financiar las necesidades generales de transporte, según nos explicó la portavoz de MDX.

Ahora bien, la pregunta que muchos se hacen es la siguiente: ¿A dónde va el dinero de los peajes?

El dinero que pagan los conductores al pasar por estos peajes no sólo es utilizado para proyectos de transporte, sino también para pagar demandas millonarias y altos intereses.

En el 2018, MDX perdió una demanda de 61 millones de dólares por incumplimiento de contrato con Electronic Transactions Consultants Corp. La pérdida se reflejó en su reporte financiero del 2018.

Además, otros 59 millones de dólares fueron reportados en gastos por intereses de deuda; es decir, un total de 120 millones de dólares, el 48% del ingreso reportado en el 2018.

El dinero que los conductores pagan en peajes ha sido
empleado también para enmendar errores y pagar intereses de deudas.

Ante la constante queja de los ciudadanos por el precio de los peajes, MDX ha implementado un programa de reembolso a usuarios frecuentes para mitigar cualquier
impacto económico.

Pero lo cierto es que las altas cifras de ingresos generados por los
peajes no se traducen en un mejor tráfico. Un estudio conducido por el INRIX (una empresa global de análisis de datos de tránsito), demostró que en el 2018 Miami se encuentra en la lista de las ciudades más congestionadas de Estados Unidos, ubicada en la posición número doce.

“Para implementar un sistema de tránsito masivo en Miami Dade se invertirían miles de millones de dólares y MDX siempre va a proponer carreteras a un costo más económico,” dijo Carlos García.

Esto puede ser más económico ahora, pero a largo
plazo el costo puede ser mayor en términos de calidad de vida, dijo el activista.

“En este aspecto nuestra urbe ha involucionado si tomamos como referencia las horas que se invierten en el tráfico”.

Según García, arrastramos el problema desde hace muchos años y debemos buscar soluciones modernas.

“Las autopistas son una idea de los años cincuenta y estamos en 2019. Mientras tanto, sigue siendo un desafío buscar otra alternativa que no sea la creación de más carreteras ante el crecimiento demográfico, los altos costos de peajes
y el congestionamiento en las vías,” dijo García.

Graduada de Periodismo por la Universidad de Oriente en Santiago de Cuba en el año 2015.
Trabajó durante los 5 años de la carrera como estudiante activa en la radio y la televisión local de la provincia Santiago. Realizó varias investigaciones durante la academia, entre las que destaca su estudio sobre los medios cubanos en la era de la Web 2.0.
Trabajó como periodista de la Dirección Provincial de Cultura en Santiago, el canal de televisión Tele Turquino y Radio Mambí. En Estados Unidos estudia actualmente la maestría de Periodismo que ofrece Florida Internacional University.

Ivette is currently pursuing a masters in Spanish Journalism and Communications at Florida International University, and is also culminating her micro-masters in Supply Chain Management at Massachusetts Institute of Technology. While she has over ten years of experience in business, she recently decided to pursue her passion of journalism. Ivette enjoys writing about economy, social issues, and entrepreneurship among other topics.