Mientras el cierre del gobierno federal entra en su quinta semana, cientos de empleados públicos en Washington D.C. recurren a los bancos de alimentos para llevar comida fresca a sus hogares.
El viernes, el Capital Area Food Bank se asoció con Urban Outreach, una organización sin fines de lucro ubicada en el sureste de la ciudad, para distribuir cajas con productos frescos y artículos de higiene a trabajadores federales y contratistas que se encuentran suspendidos de sus labores.
Urban Outreach es uno de los cinco puntos en la región de D.C. que el banco de alimentos apoya actualmente para asistir a empleados del gobierno.
“Realizamos distribuciones de alimentos cada semana, pero esta es una adicional que hacemos especialmente para ellos, para darles un poco de esperanza y recordarles que hay personas que sí se preocupan”, dijo el pastor Wil Stroman, director ejecutivo de Urban Outreach.
Abby Fenton, directora de desarrollo del Capital Area Food Bank, explicó que cada familia recibe una caja con comestibles y otra con productos frescos. Para algunos, esta es la primera vez que piden ayuda alimentaria.
“Creo que para muchas personas ésta es su primera vez haciendo algo así”, dijo Fenton. “Por eso queremos asegurarnos, con la ayuda de nuestros socios, de hacerlo con dignidad, tratarlos con respeto y facilitarles el proceso.”
El Capital Area Food Bank informó que, según su informe más reciente sobre el hambre, el 36% de los hogares en la región de D.C. enfrenta algún nivel de inseguridad alimentaria. Fenton advirtió que esa cifra probablemente aumentará mientras el cierre del gobierno se prolongue.
“Nos está afectando, y si continúa, sin duda nos pondrá mucha presión para poder mantener el ritmo”, agregó Fenton.
La voluntaria Quinnae Higginbotham señaló que Urban Outreach continuará ofreciendo alimentos frescos incluso después de que el gobierno reabra.
“No vamos a detenernos inmediatamente cuando los empleados regresen a la oficina, porque no recibirán su cheque al día siguiente”, dijo Higginbotham. “El pastor Wil planea extender la ayuda hasta que vea que pueden salir adelante sin los suministros adicionales que ofrecemos.”
Para Stroman, la misión va más allá de la asistencia de emergencia.
“Puede que hayan perdido un cheque de pago, pero todavía hay esperanza”, dijo. “Vamos a seguir aquí, ayudando, hasta que las cosas mejoren”.

























