Una enmienda constitucional de Florida podría transformar las juntas escolares en elecciones partidistas a partir de 2026, marcando un cambio significativo en la política educativa del estado.
Por qué es crucial: El 5 de noviembre de 2024, los votantes no solo elegirán al nuevo presidente de los Estados Unidos, sino que también decidirán si los candidatos para las juntas escolares de la Florida llevarán una etiqueta de afiliación política junto a sus nombres en la boleta electoral.
Nuestro estado tuvo elecciones partidistas para las juntas escolares hasta 1998, cuando se aprobó la Enmienda 11, que prohíbe las etiquetas de afiliación partidaria para los candidatos. La eliminación y consolidación de escuelas, el mantenimiento del calendario escolar y la adopción de planes de matrícula son algunas de las funciones de las juntas.
Bajo la lupa: Los miembros de las juntas escolares son elegidos por los votantes del distrito y sirven términos de 4 años. Para que la enmienda sea adoptada y puesta en marcha, se necesita una votación favorable del 60% en las urnas.
“La afiliación partidaria no debería jugar un papel significativo. Sin embargo, creo que puede influir en los votantes que eligen a estas personas, ya que, por ejemplo, si yo soy de un partido en específico, es probable que decida votar por aquellas personas que pertenezcan al mismo. Pero lo importante es saber qué conocimientos tiene”, dijo María Pereyra, quien se desempeña como profesora de español en el Departamento de Lenguas de la escuela secundaria Blanche Ely High School en la ciudad de Pompano Beach.
Esta propuesta en la boleta electoral cuenta con defensores y detractores, quienes han expresado públicamente su postura respecto a este posible cambio en la Constitución del estado. Un ejemplo de ello es el representante republicano de la Cámara de Representantes de Florida, Spencer Roach.
“Esto no se trata, al menos para mí, de promover la causa de un partido político sobre otro. Para mí, se trata de transparencia, y simplemente creo que tenemos la obligación de brindar a los votantes la mayor cantidad de información posible sobre un candidato y permitirles tomar una decisión sobre la evaluación de un candidato”.
Sin embargo, Carmen Ward, presidente de la asociación de educación del condado de Alachua, quien se opone a la enmienda, expresó.
“No creo que haya lugar para la política partidista en nuestro sistema de educación pública. Deberíamos centrarnos completamente en lo que es mejor para los estudiantes. Siento que la educación pública está siendo atacada, y parte de ese ataque es sembrar las semillas de la división. Creo que esto es parte de la estrategia de la guerra cultural que se está llevando a cabo en las aulas, en los educadores y en los sistemas de escuelas públicas por parte de nuestros líderes.”
En pocas horas, serán los votantes quienes decidirán no sólo al nuevo presidente de los Estados Unidos, sino también si esta propuesta se alinea con su filosofía e intereses.