Irritabilidad, depresión y ansiedad: El impacto de las altas temperaturas en la salud mental

Quizás en más de una ocasión has  escuchado hablar del efecto que tiene el invierno en el estado anímico de la gente y en su salud mental; la tristeza, ansiedad, o depresión que llegan a desarrollar por pasar meses en un ambiente frío, grisáceo, carente de sol y de contacto con otros. Sin embargo, poco se habla del caso contrario, y es que, nuevos estudios demuestran que las altas temperaturas sofocan no solo nuestro cuerpo, sino también, nuestra mente. 

Los últimos años han traído consigo oleadas de calor cada vez más intensas y prolongadas, y para los expertos, es hora de empezar a hablar sobre el impacto que esto tiene en la salud mental.

“Es información relativamente nueva, aunque se siguen haciendo estudios, tenemos poca información sobre cómo es que el calor llega a empeorar los síntomas en aquellos que padecen alguna enfermedad mental, y en otros llegan generar desde conductas agresivas, hasta depresión”, dijo a Caplin News la psicóloga Sonia Niño. 

Juan López, un joven de 21 años, tuvo que renunciar recientemente a su trabajo como reparador de techos, ya que las largas jornadas expuesto al sol empezaron a repercutir en su estado de ánimo. 

“Este verano fue  terriblemente caliente, y es pesado pasar cinco o seis horas bajo el sol con nada más que un gorro en la cabeza y botellas de agua para protegerse del sol”.Los estudios han encontrado un vínculo directo entre las altas temperaturas y una serie de repercusiones negativas en la salud mental, y con ello, evidencia de un aumento en la tasa de suicidios y en el número de visitas a urgencias por parte de personas que padecen alguna enfermedad mental.

El calor y las emociones

Los efectos del calor suelen manifestarse primero a través de sensaciones físicas como sudoración, dolores de cabeza o deshidratación. Estas mismas, empiezan a causar falta de sueño, incomodidad o dolores, y con ello empiezan a afectar nuestras emociones de manera silenciosa, desencadenando en irritabilidad, estrés, entre otros.

“Exponernos a largos periodos de calor extremo genera sensaciones de incomodidad física, que terminan afectando incluso nuestros patrones de sueño, y esto a largo plazo, altera el sistema nervioso, haciéndonos más susceptibles al estrés, el nerviosismo, y una irritabilidad que puede terminar en conductas agresivas”, explicó Niño.

Según los expertos, las personas cuyo trabajo requiere pasar periodos prolongados bajo el sol, podrían ser un blanco directo de los efectos de las altas temperaturas.

“Empecé a sentirme muy estresado y de mal humor constantemente, no quería hablar con la gente porque simplemente me irritaba… Un día, estábamos reparando un techo bajo un sol sofocante, yo estaba estresado, y uno de mis compañeros me hizo una broma que no aguante, y nos fuimos a los golpes… ahí dije ¡ya! no puedo más”, dijo López.

Aunque parece algo menor, el caso de Lopez es más común de lo que parece. Es importante buscar ayuda profesional ante comportamientos agresivos y cuadros de estrés o irritabilidad constantes.

Enfermedades mentales, medicamentos y altas temperaturas

Para aquellos que sufren de enfermedades mentales como depresión, bipolaridad, ansiedad o esquizofrenia, es aún más complicado lidiar con el impacto de las altas temperaturas, no solo por como esto afecta las emociones, sino porque de por sí, los medicamentos que se utilizan para tratar la mayoría de estas enfermedades afectan la capacidad del cuerpo para percibir y regular la temperatura corporal.

“Desafortunadamente, los antibióticos, antidepresivos y otros medicamentos que usamos para tratar una serie de enfermedades mentales causan en el cuerpo dificultad para regular la temperatura corporal y enfriarse con normalidad a través del sudor… Esto también puede llegar a ser tóxico para el paciente causándole más problemas, probablemente por eso vemos un aumento en el número de pacientes con enfermedades mentales en salas de urgencias durante las épocas de mucho calor”, indicó Sonia Niño. 

El calor extremo es, al final, una consecuencia del calentamiento global, un tema que, para muchos, es causa de angustia constante y que llega a causar episodios de ansiedad. El término, de hecho, ha sido catalogado como eco-ansiedad, y ha empezado a afectar a jóvenes especialmente.

“Hace más de dos años que he tenido que aprender a lidiar con ataques de pánico o de ansiedad cada vez que veo los titulares en la prensa sobre desastres naturales, incendios y mil cosas más… Este verano en especial fue muy difícil para mí, el calor tan sofocante me causa muchos pensamientos intrusivos al respecto y he tomado un poco más de medicamento del que suelo tomar”, nos contó Laura Rojas, quien enfrenta la eco-ansiedad desde hace un par de años.

¿Cómo enfrentar el impacto del calor en la salud mental?

Es importante tomar precauciones básicas antes las fuertes oleadas de calor. En caso de sentirse abrumado y experimentar síntomas, conductas o dificultades que le impiden desenvolverse con normalidad, es vital buscar apoyo profesional que le permita  lidiar con estas crisis.

Lorena Cespedes is a Colombian student at Florida International University majoring in journalism. She has a love of traveling, taking pictures and writing about opinion, sports and her culture.