Después de dos acaloradas horas, y uno que otro insulto, en el cuarto debate republicano para las elecciones presidenciales primarias los candidatos ahondaron en sus propuestas para resolver la problemática nacional e internacional.
Los temas principales que se tocaron durante este encuentro fueron la intervención de Estados Unidos en las dos guerras, los líos judiciales del ex presidente Donald Trump y su campaña a la presidencia, y la immigración en la frontera sur con México.
Para este último debate, celebrado en Tuscaloosa, Alabama, el ex mandatario Donald Trump rechazó la invitación de participar como ya lo hizo en los debates anteriores.
Gaza e Israel fueron temas ampliamente discutidos en este debate.
El gobernador de la Florida Ron DeSantis dejó en claro que para él la intervención militar es totalmente necesaria si eso significa que los rehenes americanos sean liberados. Cree que el apoyo a Israel es crucial pues considera que este es el mejor aliado de los Estados Unidos en el Medio Oriente.
“Tenemos que velar por nuestras personas. Cuando hay rehenes, el comandante encargado tiene que hacer todo lo que pueda para traerlos de regreso. Si alguien hiere a un miembro de las fuerzas armadas van a tener que pagar cuando yo sea presidente, no vamos a dejar que nuestras tropas estén sentadas sin hacer nada. Apoyamos a Israel, son nuestro mejor aliado en el Medio Oriente, tenemos una relación única con ellos y van a ver una relación fuerte cuando sea presidente de los Estados Unidos”.
El candidato Chris Cristie criticó fuertemente la respuesta de DeSantis. Dijo que se había tomado un minuto no solo para responder la pregunta si no para hablar de su experiencia en Medio Oriente y que, en el momento en que el presidente tenga que tomar decisiones tan inmediatas, su discurso no funciona. Christie presentó su posición sobre cómo trataría la situación con los rehenes americanos en Gaza:
“Absolutamente. Yo enviaría tropas americanas al rescate de los rehenes. Si tuvieran un plan que me mostrara que pueden rescatarlos de manera segura, no tendría duda alguna de enviar al ejército de los Estados Unidos para traer a nuestras personas y llevarlos de inmediato a casa”.
Al contrario de Cristie y DeSantis, Vivek Ramaswamy se dirigió a la candidata Nikki Haley para decirle que no puede decir que el ataque de Hamás fue en Estados Unidos y le cuestionó su conocimiento en geografía.
“Yo creo que como presidente de los Estados Unidos hay que ser responsable y lo que sucedió en Israel estuvo completamente mal. Lo que hizo Hamás fue medieval e inmoral. Pero decir que esto fue un ataque en Estados Unidos, reprueba un examen básico. Nikki, si no puedes identificar la diferencia que hay entre Israel y Estados Unidos puedo pedirle a mi hijo de tres años que te muestre la diferencia”.
El ataque de Ramaswamy en contra de Haley continuó mientras decía que ella no había podido ni siquiera mencionar cuatro provincias en donde enviaría las tropas americanas en Ucrania e hizo mención a su cara “en blanco” porque no tenía ningún conocimiento del tema.
Haley no respondió de regreso a los alegatos de Ramaswamy, pero Cristie si salió en su defensa diciéndole que estaba insultando la inteligencia básica de Haley y que ella era una mujer inteligente con grandes logros. Al final le pidió a Ramaswamy que parara de insultarla mientras Haley sonreía con estas palabras.
Por otro lado, los candidatos también hablaron sobre el desempeño de Trump y sus problemas judiciales.
Chris Criste tuvo varios calificativos para el ex presidente y candidato. Se refirió a Trump como un dictador, como incapaz y como un cobarde al no estar presente en ninguno de los debates.
“Tenemos a estos tres candidatos que actúan como si esta carrera fuera una competencia entre nosotros cuatro”.
Cristie no tuvo reparo en decirle a los demás candidatos que tenían miedo de Trump y por eso no decían nada en contra de él.
“Tienen miedo de responder. Este es el problema con mis tres colegas, tienen miedo de ofenderlo y les voy a decir algo: cómo se van a enfrentar a otros líderes si tienen miedo de Donald Trump… Tienes que estar dispuesto a ofender con la verdad”.
DeSantis, por su parte, dijo que el problema principal que veía en Donald Trump era el tema de la edad y que no tendría posibilidad de gobernar en dos términos.
“El tiempo lo dice todo, creer que poner a alguien en el poder que tiene casi 80 años y que esto no tiene efectos sabemos que no es real. Tenemos la oportunidad de tener una nueva generación de líderes y continuar hacia adelante con este país. Necesitamos un presidente que pueda gobernar por dos términos, yo creo que necesitamos a alguien más joven”.
En cuanto a la immigración, Nikki Haley fue muy clara y directa con las deportaciones y lo que cree que debe pasar con las personas indocumentadas que han entrado bajo el gobierno de Biden.
“Todos los siete u ocho millones de ilegales que han venido bajo el gobierno de Biden, absolutamente tienen que regresar. Biden le dio estatus de protección temporal a 500,000 venezolanos, eso significa medio millón de seguros sociales, medio millón de licencias de conducción. Yo se por mi tiempo en las Naciones Unidas que lo primero que hacen es coger el teléfono y decir “yo pude venir, ven tú también”, y eso hace que lleguen más personas. Hay que ir y deportarlos para que sepan que esto no puede pasar otra vez. Ahora, para aquellos que llevan más tiempo en este país hay que empezar a mirar quiénes son, cuánto llevan aquí, si han pagado impuestos, si han estado trabajando e identificar quién más está allá afuera”.
DeSantis dejó muy claro que la construcción del muro es imperativa y planteó el cobro de un impuesto a los trabajadores extranjeros para poder costear su construcción.
“Los carteles están invadiendo nuestro país y están matando miles de personas cada año. El comandante a cargo, no solo tiene una responsabilidad de pelear en contra de estas personas, que vamos a categorizar como organizaciones terroristas extranjeras. Si tuviéramos un muro a través de la frontera del sur esto no estaría pasando.”.
Sin duda, el último encuentro de este año entre los candidatos republicanos para la presidencia estuvo lleno de discrepancias y los insultos e interrupciones acompañaron sus propuestas e ideales.
